Viendo la hipocresía e injusticias a diario, parece imposible hacer algo para lograr un cambio. la motivación económica es el motor que mueve nuestro mundo, pero el simple dinero no es mas que una herramienta. La verdadera motivación es la supervivencia, nuestro bienestar y el amor por nuestros seres queridos. El problema resulta en confundir nuestra verdadera y vital motivación con la herramienta de que el actual sistema dispone para lograr nuestros objetivos es decir, el dinero.
Norman Birnbaum, profesor emérito de la Universidad de Georgetown, dijo ayer que hubo un golpe de Estado en EEUU. El premio Nobel Stiglitz dijo el año pasado o mandamos a los banqueros a la cárcel o la economía no se recuperará. Se referían a la cúpula militar-financiera que, digo yo, impulsa políticas totalitarias fundadas en la militarización de las relaciones internacionales, la colonización de la ONU, diversas formas de discriminación, la guerra y la total subordinación de los Estados a los intereses del capital financiero.
e ha ido construyendo con mentiras y violencia. Obama dijo que si el Congreso no aprobaba el incremento del techo de la deuda, no llegarían los cheques para la seguridad social.
Se disminuyen los impuestos a los ricos y se gasta en la guerra, lo que debilita la economía y al Estado, pero fortalece a la cúpula militar-financiera.
Se desarrollan políticas que disminuirán el consumo. Siendo este un alto componente del PIB estadounidense, ello golpeará a la economía productiva y generará menos impuestos e ingresos al Gobierno.
Los valores bursátiles caen y se crea una sensación de debacle mundial. Pero esto es impulsado por la cúpula financiera para golpear a gobiernos y empresas y concentrar más capital en pocas manos.
Esta es una economía basada en el fraude. Su debacle es inevitable. No se caerá sola o su derrumbe nos puede hundir a todos. Son importantes las medidas defensivas de Unasur. Ahora más que nunca hace falta el espíritu y la ofensiva que logró derrotar el Alca y detener el golpe de Estado que está en marcha contra la humanidad y el planeta.
http://www.aporrea.org/tiburon/a128603.html
Hay que nacionalizar a todas las multinacionales y bancos privados y sobre todo los bancos centrales y cerrar la bolsa y fijar una paridad de monedas y congelar la inflación a crecimiento cero. El estado somos todos o ninguno.
(si los banqueros son los mismos que están en el gobierno ¿quien controla al controlador?)
Allan Greenpan (Reserva federal criminal), creó una cosa por los 80 que que llaman derivados finacieros para acaparar el valor real de los recursos, de las empresas y de los estados a través del fráude y a especulación finaciera. Los bancos su herramienta a través de los créditos y de los valores de fondos en bolsa ficticios e hinflados especulativos. Para ello tenía que destruirse la ley Gass Steagal que Clinton terminó de matar.
Se trata de privatizar a todos los servicios públicas de cada nación y a todos los bancos en una sola entidad financiera global.
La Ley Glass - Steagall
Llegada al poder de Franklin D. Roosevelt : “Prefiero rescatar a los que producen alimentos que a los que producen miseria” .
La ley Glass-Steagall se caracteriza por las siguientes notas:
1. Total separación entre la banca de depósito y la banca de inversión (bolsa).
2. Creación de un sistema bancario conformado por bancos nacionales, estatales y locales. La ley Anti-monopolio (Sherman Act) impedía la competencia desleal entre ellas.
3. Los banqueros fueron vetados de participar en los consejos de administración de las empresas industriales, comerciales y de servicios.
La finalidad de estas medidas era que no se pudiera especular con el dinero que la gente había depositado en los bancos. Esta separación de funciones contribuyó a limitar el tamaño de los grupos bancarios estadounidenses. A pesar del tamaño de la economía estadounidense hasta el final del siglo XX, los más grandes bancos a nivel mundial serían europeos y japoneses.
Ahora bien, ¿qué paso?, que mientras que los bancos comerciales estadounidenses (a través de algunos artificios contables y jurídicos) y sobre todo por la creación de filiales en el extranjero (principalmente en Londres), participaban en el crecimiento de los mercados financieros, la banca de inversión se encuontraba sub-capitalizada. Por eso durante los años 70 se aprobaron diversas decisiones que limitarán el alcance de hecho de la Ley, fragilizándola y convirtiendo a la City de Londres en la primera plaza financiera del mundo durante mucho tiempo.
La banca central estadounidense intentó eliminar la Ley, abiertamente ya, a partir de 1986, pero hasta 1999 no lograría convencer al Senado para abolir este último «vestigio garantizador de los años 30». Pudieron los lobbys reclamando la fusión gigante entre City y Travellers durante el segundo mandato del cobarde Bill Clinton.
El resultado lo vemos en el siguiente ejemplo: el director del banco invita a una pandilla de bandidos y les entrega las llaves y los códigos de seguridad de las sucursales bancarias. Los bandidos proceden a robar esas sucursales. Luego el director del banco le exige a los clientes en la taquilla, no solo que acepten las pérdidas y le paguen los daños al banco, sino que también paguen los gastos de los bandidos, mientras que a estos les sigue dando información de cómo apostar sobre la probable insolvencia de esos clientes y, ante la expectativa de sus posibles muertes prematuras, la forma de sacarle ganancia a los seguros de vida.
Pues un parecido similar tienen quienes invitaron a los fondos especulativos a Alemania en el 2004, y que ahora contemplan pasivamente cómo estos mismos fondos especulan no solo en contra de Grecia, sino con el desplome del euro, a la vez que exigen que los contribuyentes cubran las pérdidas, y que los ciudadanos se aprieten el cinturón.
De manera que los gobiernos de Europa o instrumentan de inmediato una norma estilo Glass-Steagall, para evitar un desplome caótico del euro, las consecuencias serán catastróficas para la economía real y los niveles de vida; es decir, se ha de crear una normativa que haga de corta fuegos estricto entre los bancos comerciales y los bancos de inversión.
La especulación de las compañías inversionistas financieras, fondos especulativos, fondos de accionistas privados, etc., tienen que ser separados radicalmente de toda actividad de ahorro y préstamos de los bancos comerciales.
Y si las instituciones financieras metidas en operaciones de alto riesgo, hacen apuestas erradas, que sean ellos mismos quienes asuman las consecuencias del resultado personalmente. Si creen que van a seguir siendo los contribuyentes, quienes dedican sus vidas al trabajo y al ahorro, los que apencarán con sus apuestas van dados.
Si se comprobara que es imposible establecer tipos de cambio fijos en el corto plazo, tendremos que penalizar de inmediato la especulación monetaria. No podemos aceptar que gerentes generales “de cinco estrellas” de los mayores fondos especulativos decidan, en una cena privada en Manhattan, que van a especular para desplomar el euro a una paridad de 1:1 en relación al dólar.
Según el Wall Street Journal, representantes de los fondos especulativos más grandes del mundo se reunieron el 8 de febrero en una cena privada en el centro de Manhattan y acordaron llevar a cabo un ataque especulativo concertado contra el euro. El diario cita a Hans Hufschmid, quien dijo que, como es probable que el euro se deprecie hasta alcanzar la paridad con el dólar, es una buena oportunidad de “hacer mucho dinero”. Hufschmid fue director de Solomon Brothers, y ahora dirige el fondo especulativo GlobeOp Financial Services SA.
El anfitrión de la “idea de la cena” fue la firma de corretaje e inversiones Monness, Crespi, Hardt & Co. El fundador de Greenlight Capital, David Einhorn, aparentemente estuvo presente al igual que el gerente de SAC Capital, Aaron Cowen, quien ve que “todos los resultados posibles con relación a la crisis de la deuda de Grecia van a ser negativos para el euro”. También estuvieron representados Soros Fund Management y Brigade Capital.
Esta reunión coincidió, informa el Financial Times Deutschland, con el rápido aumento neto de las posiciones en corto sobre el euro en los mercados a futuro. La misma semana hubo un aumento en el número de contratos en la Bolsa Mercantil de Chicago apostando a la caída del euro, que alcanzaron la cifra record de 60,000, de acuerdo con un informe de Morgan Stanley. Tres días después de la cena, el valor del euro cayó a $1.36, de $1.51 que valía en diciembre. Las transacciones a nivel mundial llegaron a nuevos niveles en enero, con 820,000 contratos al día, por un valor nominal de $108,000 millones de dólares, un aumento de 78% comparado con el año anterior. Entre los participantes en el mercado hubo una tendencia increíblemente visible a apostar de nuevo por el debilitamiento del euro.
El Consejo de Europa está obligado, de urgencia, a proteger de todo mal a la población europea introduciendo una Glass-Steagall y prohibiendo la especulación monetaria. Si a la Canciller Merkel, quien parece que acaba de darse cuenta que el euro está en una situación difícil, y realmente le preocupa garantizar un presupuesto equilibrado, éste es el problema que debe erradicar. Si es que puede y la vieja sinarquía europea se lo permite. Ya veremos quién puede más.
Por su parte, la vieja sinarquía europea debe quedarse calladita y no proponer de nuevo que sean los ciudadanos quienes paguen sus golferías, si no quiere que sus cuellos salten por los aires.
El final de la ley
Esta ley tuvo poderosos enemigos en el sector bancario a lo largo de toda su existencia. En 1985, bajo la presidencia de Ronald Reagan, la Glass-Steagall recibió una golpe importante cuando el entonces jefe de Estado permitió que los bancos se convirtieran en asesores de inversión en la captación de recursos públicos. Reagan también facultó la puesta en marcha de instrumentos financieros no atados directamente a los bancos pero sí a sus fondos de inversión.
La presión del lobby bancario hizo que, en 1999, el expresidente norteamericano Bill Clinton y su secretario del Tesoro, Robert Rubin -actual asesor económico de Obama- derogaran, con la aprobación del Congreso, la Ley Glass-Steagall haciendo posible que todo aquello prohibido dejara de serlo... leer --> http://larepublica.es/firmas/blogs/index.php/nevskiprospekt/2009/03/06/a-65279-la-ley-glass-steagall
leer 10 años después del fin de la Ley Glass-Steagall. Desregulación maníaca.
La revocación de la Glass-Steagall eliminó la prohibición legal de combinación entre bancos comerciales, por una parte, y bancos de inversión y otros servicios financieros por otra.... leer --> http://www.attac.es/10-anos-despues-del-fin-de-la-ley-glass-steagall-desregulacion-maniaca/
Lo mejor es verlo... y observar el poco temor que tenía Gadafi a ser victima de un francotirador, así como la respuesta de la gente por las calles, viajaba por Libia igual que nuestros lideres y reyes... que van con coches blindados que cuestan una fortuna... ¿por que será?... ¿a que temen nuestros lideres y reyes?
Interesante aportación de JL de mundo desconocido.com
Hay cierto documento en baja resolución aparecido en http://libroverdevenezuela.blogspot.com/ que supuestamente es un acuerdo entre los rebeldes y el gobierno de Israel acambio de ayuda militar e instalación u otros.
NO A LA GUERRA EN LIBIA
http://libia-sos.blogspot.com/
http://www.libiahabla.org/
¿Donde están todos aquellos que salieron a decir no a la Guerra?, nuestros políticos nos están mintiendo.
Para ver diversos temas recomiendo:
BASE DE DATOS: CONSTITUCIONES - JURISPRUDENCIA - DOCUMENTOS, VIDEOS Y DISCURSOS HISTÓRICOS
En Libia, el objetivo clave del intento del derrocamiento de Kadafi es el petróleo. La gran dinámica movilizadora de las invasiones militares, las guerras y conflictos regionales, y los golpes internos de la CIA contra líderes y presidentes desgastados que ya no "cierran" con el control estratégico hegemónico de la primera potencia imperial del sistema capitalista, es el apoderamiento de los mercados y de las fuentes naturales del "oro negro". Un recurso clave (y en extinción) para la supervivencia futura de las potencias centrales.
Por Manuel Freytas (*) manuelfreytas@iarnoticias.com IAR Noticias/
La clave petrolera africana
Lo de Libia estaba cantado. Es el premio mayor en el tablero de las "revueltas populares" armadas y organizadas por la CIA, el Mossad y los servicios "aliados" en África y Medio Oriente.
Después de iniciar un proyecto de remodelación "democrática" expulsando a sus desgastados dictadores aliados en Egipto y Túnez, EEUU va por el petróleo libio y por una posición estratégica en el dispositivo del control geopolítico militar en África.
Para EEUU y los centros del poder imperial mundial, África es un continente seguro de abastecimiento petrolero que contrabalancea la inestabilidad conflictiva de un explosivo Medio Oriente, y de un Asia Central en disputa permanente entre el eje Rusia-China y el bloque "occidental" EEUU-Unión Europea.
En el marco de la "guerra fría" energética con China y la Rusia de Putin, el poder imperial norteamericano y sus transnacionales intentan convertir a África en una especie de colchón energético de seguridad frente a un explosivo Irán y un Medio Oriente cruzado por los conflictos militares.
La importancia de África como suministrador de petróleo a las potencias centrales es clave. Ya produce cerca del 12% de lo que se consume en el mundo y el 25% de lo que consumen los EEUU, más de lo que este último país importa desde Arabia Saudita.
Desde el marco geopolítico y estratégico de la "guerra contra el terrorismo" EEUU, potencia locomotora del sistema capitalista y sus socios de las grandes potencias europeas, avanzan en su proyecto de conquista del continente africano para posicionarse en el control de sus reservas energéticas y minerales.
A este proyecto respondió la decisión de la administración Bush de crear el "The United States Africa Command (AFRICOM), un comando de "guerra contraterrorista" que empezó a operar activamente en toda la región en el 2008.
El control geopolítico y militar del continente africano, que produce entre 12 y 14 millones de barriles diarios de petróleo (estimaciones para el 2012), otorga a los EEUU el margen de maniobra y seguridad suficientes que justifican las intervenciones militares en estos países.
Los gobiernos africanos, controlados por oligarquías y "señores de la guerra" financiados y protegidos por Washington, se ven cada vez más impotentes para controlar a los movimientos armados nacionalistas que obstaculizan el saqueo de las transnacionales, como es el caso de Somalía y el Cuerno de Africa.
En este escenario, y siguiendo la nueva doctrina impuesta en la revisión cuatrienal de la Defensa de febrero de 2006, el Pentágono comenzó a desarrollar operaciones militares en alta escala por todo el territorio africano, principalmente en sus regiones energéticas y mineras claves del sur y del norte, creando unidades especializadas dedicadas a la instrucción y el adiestramiento de tropas locales en el "combate al terrorismo".
La estrategia operativa incluye reuniones entre estados mayores de países regionales con oficiales y funcionarios del Pentágono, maniobras y ejercicios conjuntos de las tropas, vuelos sistemáticos de aviones de reconocimiento, localización a través de fotos tomadas por satélites militares norteamericanos, y de provisión de armas y tecnología de alta precisión a las fuerzas implicadas en la "guerra contra el terrorismo".
La estrategia del Pentágono en África responde a un doble objetivo, geopolítico-militar y económico.
Además del negocio que proporciona a las armamentistas y a las contratistas de servicios del Pentágono el incremento de las operaciones militares contra el "terrorismo" en la región, se estima que África y sus regiones proporcionarán, en apenas una década, el 25% del crudo que consumirá EEUU en 2015.
Tener el control del acceso a esas fuentes de recursos se ha convertido en un objetivo estratégico central para Washington y sus corporaciones protegidas por el Pentágono.
La función y misión principal del nuevo mando militar USA para el continente africano, es la de vigilar y controlar las fuentes energéticas africanas, así como sus sistemas de distribución mundial (oleoductos, buques petroleros, y rutas).
Y eso es lo que están haciendo las tropas norteamericanas y los gobiernos títeres "asociados" como los de Nigeria y Yemen (entre otros) que utilizan el exterminio en masa de rebeldes y de población justificado bajo el argumento del combate contra los "grupos terroristas". Esta misión principal de las tropas imperiales fue enunciada en un principio, por el presidente Jimmy Carter en enero de 1980, cuando describió al caudal petrolero del Golfo Pérsico y de Africa como un "interés vital" para los EEUU.
Carter, elegido luego Premio Nobel de la "Paz", afirmó que EEUU debería emplear "cualquier medio que fuese necesario, incluyendo la fuerza militar" para enfrentar y neutralizar cualquier intento por parte de un poder "hostil" para bloquear esos recursos estratégicos.
Con la creación del nuevo comando unificado para las operaciones militares en Africa (AFRICOM), anunciado por el secretario de Defensa, Robert Gates en febrero de 2007, Washington y sus corporaciones petroleras, detrás de la fachada de la "guerra contraterrorista" comenzaron un plan totalizado de control y apoderamiento del petróleo y de los recursos estratégicos del continente negro.
En este escenario hay que leer los acontecimientos de "revueltas populares" organizadas por la CIA en África y Medio Oriente, y el sangriento golpe interno que está funcionando contra Kadafi en Libia.
El "golpe petrolero" en Libia
A diferencia del resto de los procesos de "protesta popular en el mundo árabe islámico" infiltrados por la CIA y las inteligencias "aliadas", Libia se inscribe en los patrones operativos de las "revoluciones naranja" en el espacio soviético, o en los "golpes budistas" del Tibet o Birmania, o en la rebelión "reformista" para derrocar a los ayatolas en Irán, encuadrados en la nueva "guerra fría" por áreas de influencia (militar y comercial) que mantiene el eje capitalista Rusia-China con el eje capitalista USA-UE-Israel.
La clave del golpe contra Kadafi es el apoderamiento del petróleo libio, cuyo control (como sucedió con Irán en 1979) perdió con la irrupción de Kadafi en el liderazgo de Libia en 1969.
Libia, miembro de la Organización de Países Productores de Petróleo (OPEP), es el cuarto productor de petróleo en Africa, después de Nigeria, Argelia y Angola, con cerca de 1,8 millones de barriles diarios y posee unas reservas evaluadas en 42.000 millones de barriles.
Según la agencia norteamericana de información sobre la energía (EIA), Libia era en 2009 el cuarto productor de petróleo en África con una producción de 1,789 millones de barriles diarios, detrás de Nigeria (2,211 mbd), Argelia (2,125 mbd) y Angola (1,948 mbd).
Libia también quiere desarrollar su producción de gas natural, sector en el que tiene reservas estimadas en 1,540 billones de m3, según la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
El país ha duplicado casi sus exportaciones de gas natural en tres años, de 5.400 millones de m3 en 2005 a más de 10.000 millones de m3 anuales, también según estadísticas de la OPEP.
Libia exporta la mayor parte de su petróleo a los países de Europa, entre ellos Italia, Alemania, España y Francia, y aunque participan del negocio, las petroleras norteamericanas no tienen la hegemonía en la extracción y comercialización del crudo de ese país.
Este dato es clave para entender el golpe interno que la CIA lanzó en Libia montada en la fachada de las "revueltas árabes" contra "regimenes dictatoriales de Africa y Medio Oriente.
De la misma manera como trata de desestabilizar Irán con la misma metodología operativa de infiltración y orientación política de las "protestas populares", Washington aprovecha este escenario para lanzar un movimiento interno oreintado a derrocar a Kadafi, un aliado "inestable" que privilegia las relaciones con Europa y con los países incursos dentro del "eje del mal".
A la llegada al poder del coronel Kadafi en 1969, las compañías petroleras, mayoritariamente estadounidenses, extraían del suelo libio más de 2 millones de barriles diarios.
Pero muy rápidamente, el líder libio nacionalizó el petróleo, limitó la producción, le quitó la hegemonía de extracción y comercialización a las pulpos norteamericanos y creó la Compañía Nacional del Petróleo (NOC), que inició emprendimientos conjuntos con participación minoritaria de empresas extranjeras.
Después de veinte años de aislamiento, el régimen de Kadafi volvió a abrir los recursos energéticos y petroleros libios a la voracidad de las compañías petroleras occidentales, principalmente de la Unión Europea.
El ex primer ministro británico Tony Blair fue el primero en estrechar la manos con el "viejo enemigo" de Occidente en Trípoli. Al hacer eso, comenzó a conducir a Libia fuera de la marginalidad financiera, y a entregarla a los brazos de Royal Dutch/Shell y BAE Systems , que cotizan en la Bolsa de Londres.
La visita de Blair a Libia en 2004, la primera de un líder británico desde 1943, estuvo marcada por una sociedad establecida entre Shell y la petrolera estatal libia, unos 30 años después de que la firma anglo-holandesa produjera por última vez en suelo libio.
Desde el año 2003 se instalaron en Libia la corporación italiana ENI, la francesa TOTAL, la española REPSOL YPF y la angloholandesa Royal Dutch Shell. Las usamericanas Chevron y Occidental tuvieron que esperar tres años a que EEUU levantara sus sanciones comerciales para poder ingresar en la torta petrolera libia.
En 2010, de enero a noviembre, los países europeos miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) compraron una media de 1,06 millones b/d de Libia, precisó la Agencia Internacional de la Energía (AIE).
En este escenario de relativa "postergación" (su participación en Libia no es hegemónica) de los consorcios petroleros norteamericanos en relación a los europeos marca una de las líneas conducentes centrales de las actuales operaciones desestabilizadoras y golpistas contra Kadafi en Libia.
En el actual escenario represivo en Libia, se verifica la presencia de actores internacionales conocidos y de operaciones golpistas de EEUU que se repiten como un calco a escala global con distintos nombres, como "revoluciones naranjas" en los ex países soviéticos, "rebelión budista" en el Tibet y el sudeste asiático, y los más recientes denominados "revueltas árabes islámicas" que se propagan por África, Medio Oriente y amenazan con extenderse a China, Rusia y los ex países soviéticos.
Por un lado Kadafi y su régimen de más de 40 años cierra sus fronteras a la prensa internacional y reprime en forma sangrienta con la fuerza militar a los grupos "opositores" armados y financiados por la CIA y los "servicios occidentales".
Y por el otro, el bloque "democratizador" con EEUU, la UE, la ONU y las ONG de la CIA, crea las condiciones internas e internacionales para terminar con Kadafi e instalar un "gobierno democrático" controlado por Washington.
Viejas estrategias, viejas operaciones, y viejos actores conocidos. El objetivo estratégico siempre es el mismo: control geopolitico y militar regional, control del gobierno, control de los recursos estratégicos y control de los mercados.
En Libia, el objetivo clave del intento del derrocamiento de Kadafi es el petróleo.
La gran dinámica movilizadora de las invasiones militares, la guerras y conflictos regionales, y los golpes internos de la CIA contra líderes y presidentes desgastados que ya no "cierran" con el control estratégico hegemónico de la primera potencia imperial del sistema capitalista, es el apoderamiento de los mercados y de las fuentes naturales del "oro negro".
Un recurso clave (y en extinción) para la supervivencia futura de las potencias centrales.
(*) Manuel Freytas es periodista, investigador, analista de estructuras del poder, especialista en inteligencia y comunicación estratégica. Es uno de los autores más difundidos y referenciados en la Web. Ver sus trabajos en Google y en IAR Noticias